«El veganismo no es una dieta, a dieta estoy yo.»
Esta frase estuvo durante años en la biografía de mi Instagram y sigue teniendo vigencia. Y es que Beyoncé vuelve a hablar de la falsa «dieta vegana» que ha hecho para actuar en el Coachella. B, nos deberías dejar el veganismo tranquilo, que luego se lía todo el mundo a decir sandeces.
El veganismo va mucho más allá de la alimentación por definición. A mi me gusta la que promueve la Vegan Society, la de Watson, que viene a decir que el veganismo es no explotar animales. Ese no a la explotación animal no se limita a lo que ponemos en el plato, sino a cualquier ámbito de la vida: vestimenta, cosmética, higiene, ocio…
Para muchas personas, es una posición ética, o una postura política. La liberación animal es, de hecho, una reivindicación social. Proyectos como el de Aitor Garmendia, Tras los muros, reivindican la libertad y el respeto a los animales mostrándonos la realidad que viven en las explotaciones ganaderas.
Sin embargo, es habitual que algunas personas lo reduzcan al ámbito alimentario. No nos puede extrañar cuando hay gente que habla de veganismo healthy, celebrities como Beyoncé que hablan de dieta veganas para adelgazar y medios de comunicación que amplifican este mensaje acríticamente.
Para qué investigar y hablar de pautas dietéticas vegetales, si podemos poner la palabra «veganismo» en el titular y asegurarnos más visitas, ¿verdad? A parte de estar mal, está muy feo.
¿Qué es la dieta vegana?
La dieta vegana es la dieta de la población vegana. Chimpún.
Sí, podemos hablar de dieta vegana porque de alguna forma tenemos que caracterizar la dieta de una población que, por motivos ideológicos, se restringe los alimentos. Es una necesidad para muchas ciencias sociales pero también para la nutrición o la medicina.
Beyoncé, amiga, tu dieta para adelgazar no es una dieta vegana.
Pero Marta, ¿no te das cuenta de que entonces se confunde a la gente?
A mi tampoco me gustaba hablar de dieta vegana, y de hecho suelo preferir hablar de dietas vegetales o vegetarianas. Especialmente si se trata de divulgación a público general, que entiende dieta única y exclusivamente como pauta terapéutica. O, peor aún, dieta como dieta adelgazante.
Esto no implica que una persona, por llevar una dieta 100% vegetal, pueda decir que come vegano o que es vegana o que tiene una dieta vegana.
De hecho, hay alimentos que son 100% vegetales y que un vegetariano estricto no ha de tener problemas en comer que no son aptos para personas veganas. Por ejemplo, muchos vinos utilizan gelatinas o albúmina de huevo durante el proceso de clarificación. No es un ingrediente, y no lo veremos en la etiqueta, pero lo invalida como apto.
Pero, ¿sabemos qué significa «dieta»?
Sí, la dieta puede ser una pauta terapéutica, en la que se controla la ingesta de alimentos con un fin específico: tratar una enfermedad, disminuir o aumentar de peso, mejorar una condición… Lo que solemos entender como dieta, vaya. A veces es un papelajo que nos imprimen en la consulta del médico (mal) y otras es una pauta personalizada que nos hace un dietista (bien).
Pero la dieta es también el patrón alimentario de una persona o de un grupo de personas. Si te apuntas todo lo que comes en un diario y de ahí sacamos una caracterización de cual es tu patrón alimentario, esa será tu dieta.
Si lo hacemos para un grupo de población más grande, estamos caracterizando la alimentación de ese grupo. Por ejemplo, cuando se habla de Western diet, o «dieta occidental», nos estamos refiriendo al patrón alimentario de la mayor parte de la población occidental: bebidas azucaradas, productos ultraprocesados…
Esa imagen de hamburguesa, patatas fritas y refrescos que se ha extendido por todo el mundo. Y no solo los alimentos son característicos de una dieta, también lo son los hábitos alimentarios. Así que hay un punto donde todo eso se cruza y nos encontramos con la Vegan Western diet, un tipo de dieta que nunca recomendará la OMS ni ningún dietista con dos dedos de frente.
Para acabar, recordar que hay dietas que tiene que ver con la religión. Cuando se habla de dieta halal, la que siguen las personas que profesan el islamismo, y de dieta kosher, en el caso del judaísmo, ninguna de ellas se relación con la salud ni la estética, sino con las creencias.
¿La dieta vegana es una dieta saludable?
La dieta vegana, al contrario de la Western diet, sí puede ser saludable en individuos que tengan hábitos saludables. Si está bien planificada, está recomenda para todas las etapas de la vida. No lo digo yo, lo dicen asociaciones de nutrición tan prestigiosas como la ADA. Así lo recoge también, por ejemplo, la Generalitat de Catalunya.
No podemos decir que sea saludable de por sí, ya que también se puede llevar una dieta occidental vegana ahora que tenemos tantos ultraprocesados a nuestro alcance. Eso sí, si lo que hacemos es tener una dieta basada en verduras, frutas, semillas y granos, entonces la cosa cambia.
Sí es cierto que las personas veganas suelen, en media, comer de forma más saludable y estar más informadas sobre alimentación y nutrición. Al menos esos dicen las estadísticas de países como EEUU o Reino Unido, donde se recogen los datos. En España no lo sabemos, porque pasan de nosotros y no preguntan, aunque se intuye a base de cruzar datos. Desde aquí, por el bien común, pido a AECOSAN que se incluya la pregunta sobre dietas vegetarianas y vegana de una vez.
También es cierto que hace muy poco que hay tantos ultraprocesados veganos, así que es posible que esta tendencia cambie. Ya vemos que hay queso, pizza, hamburguesas y helados veganos que están en igualdad de condiciones para ser considerados alimentos insalubres. El sello Vegan no implica, en ningún caso, que un alimento sea saludable. Ni tampoco más saludable que otro no vegano. ¡Que no te engañen (y no te engañes)!
Así que no, la dieta vegana ni es adelgazante, ni más saludable, ni mejor para los deportistas.
Ahora bien, una dieta vegana bien balanceada es apta para todos los momentos de la vida. Y una persona vegana puede llevar desde una dieta cetogénica a una pauta para bajar de peso o para ganar músculo. No hay ninguna limitación real. Lo que nos faltan son diestistas nutricionistas y técnicos superiores en dietética actualizados en el sistema de salud público .
[…] suerte con nuestra nutrición vegana y con todos tus otros propósitos para este año 2020 que ya solo falta la mitad para que […]